
Frío inicio de semana tengan, visitantes de éste humilde blog. Después de un movidito fin, traigo para ustedes otra entrega puntual de nuestra reseña semanal. En esta ocasión, el espacio lo ocupa una figura de una de mis líneas favoritas de Transformers. El es pequeño, veloz y tramposo. Su inteligencia se mide en millas por hora y está dispuesto a probarlo en la pista. El es... ¡Ransack Cybertron!
¿Recuerdas cuando lo adquirí?
Como es costumbre, al ser la primera figura de la línea que reseño, haré una breve introducción. La línea Cybertron (Galaxy Force en Japón) para no variar apareció a la par de la última parte de la llamada ‘Trilogía Unicron’. Tanto la serie animada como la línea de juguetes aparecieron entre el 2005 y el 2007, incorporando al legado TF varias reconstrucciones de personajes populares y otros tantos nuevos para la continuidad. El centro de la historia gira en torno a los Autobots y Decepticons que buscan en varios planetas temáticos el secreto de las Cyber Keys, las cuales garantizarán a su poseedor poder ilimitado. Súper cliché.
El caso es que, con todo y la premisa ‘got to catch’em all’, a mi gusto, esta línea es portadora de muchos de los mejores modelos robóticos en la historia de los Transformers. Me imagino que al tener prácticamente más de 20 años haciendo juguetes, infinidad de software de diseño y carta blanca para recrear a los personajes, Hasbro/Takara pudo alcanzar una breve, pero sustanciosa cúspide en la creación de figuras. Varios de los Transformers de mi top 20 pertenecen a esta línea gracias a su inteligente nivel de transformación y a los excelentes modelos robot que poseen. Ransack es un humilde ejemplo de esta lógica.

El modo alterno de este personaje es el de una motocicleta del planeta Velocitron (yet another cliché) en el que todo gira en torno a carreras tipo Wipeout entre robots que compiten todo el tiempo. Ransack, hasta donde sé —ya que nunca he visto más de tres capítulos de Cybertron— no tenía afiliación, simplemente era hojaldra por naturaleza. Una vez que Megatron llegó a meter el mal al mundo de la velocidad, pues el rojizo amigo se sintió más cómodo siendo Decepticon. Desconozco si hay humanoides en Velocitron, pero debe ser, sino, ¿cuál es el propósito de transformarse en una moto con espacio para un conductor si no existe gente para pilotar?

Al parecer, Cybertron incluyó a los Transformers el tamaño Scout, un tanto más pequeño y económico que el Deluxe. Ransack pertenece a este segmento al ser una figura básica, pero con el detalle suficiente para llamar la atención. Los elementos traslúcidos no desentonan con el resto del cuerpo (a diferencia de lo visto anteriormente en Energon, por ejemplo) y en este caso en particular, los tonos rojos se ven increíbles. Especialmente las ruedas gruesas que le dan el filing Xtreme G a la figura.



La llave de Ransack activa su cañón trasero dual, que además de ser una triquiñuela tramposapara las carreras, al parecer también funciona como un booster de velocidad —todo esto en la serie, en la vida real ni siquiera dispara—. La idea es simple y aunque tiene sus ventajas sobre los Mini–Cons de Armada —por ejemplo, las llaves no estorban tanto al colocarse para activar la función—, también tiene sus bemoles —todas son iguales, salvo el color, así que no tienen mayor gracia—. Además siempre será mejor un robot extra, por pequeño o estorboso que sea, que un pedazo de plástico sin chiste.


Al ser una figura Scout, la transformación es todavía más simple que la de una Deluxe. Ignoro si existe alguna persona en el planeta que pudiera requerir un instructivo para transformar una figura de este tipo, pero uno nunca sabe. Retiras el cañón dual y separas la rueda trasera en dos mitades y el asiento se convierte en los brazos. El panel de control forma el pecho y el resto son giros que salen por lógica. Una transformación completa que toma menos de 10 segundos.


Ransack es muy pequeño, pero no por ello carece de buenos detalles. Su rostro picarón tiene los colores precisos y la placa dorada en el torso le dan el toque robótico a una figura que de otra manera podría parecer más un humano disfrazado que un robot. Aunque sus manos con puños estáticos y orificios pecan de simples, funcionan gracias a una buena articulación que permite varias poses heróicas e incluso aquellas que desafían un tanto la gravedad.



Ransack, como primer emisario de la línea Cybertron, es un buen ejemplo de lo que podemos encontrar en estas figuras: vehículos en su mayoría irreales con excelentes modelos robóticos. También tenemos uno de los principales problemas de la línea, las Cyber Keys que funcionan más como un pretexto de mercadotecnia que como un elemento funcional en la figura —seamos honestos, en cualquier caso, la utilidad de las llaves se resolvía con un switch o botón, pero no sería tan llamativo—. El nivel de articulación, al igual que el diseño de los robots hacen que Ransack y el resto de las figuras Cybertron, sean llamativos exponentes en cualquier colección que los incluya.
Costo actual MIB (carded): entre 15 y 30 dólares
Costo actual LOOSE: entre 10 y 15 dólares (a mi me costó aproximadamente 12 dólares)
Modo vehículo: 8.0
Modo robot: 8.5
Overall: 8.5
Bueno el diálogo, buena transformación, buuena semana, saludos...
ResponderEliminarThe exclusive Police Type Gasket version is my favorite.
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