Razón para tener un blog 3 de 10: las páginas (html) de la historia

Tal vez la más obvia -pero menos evidente en algunos casos- razón para escribir una bitácora electrónica (la mamonería nerdoide traductora fue a propósito) es la de preservar un historial de las actividades importantes de su autor. Y es que a diferencia de las cosas malas, que pueden o no ser buen material para un post entretenido, una buena noticia siempre será motivo de inclusión en el blog de cualquier persona. Vamos, sin estos highlights que le dan color a la cotidianidad, la vida de cualquiera sería más bien del tipo genérico. Y son justamente estos momentos importantes lo que se convierten en el marco capitular de nuestra vida, o por lo menos, de la que llevamos nota en esto que viene siendo la supercarretera de la información (idem)...

En este blog, he mencionado eventos muy importantes, como por ejemplo mi ascenso, cuando cumplí cuatro años con Red, el momento en el que llegué a los 100 TF, y otros momentos memorables. Queda claro que muchos de estos eventos se pueden predecir (sabía que llegaría a los 100 Transformers, por ejemplo) mientras que otros tantos surgen ante la sorpresa del lector (mi ascenso no era algo que precisamente esperaba este año). Pero, sin importar el tipo de evento importante, lo valioso es que un blog, además de servir como fuente de chisme documental, también conserva estos importantes momentos para la futura referencia.

En las últimas dos semanas, digamos que viví momentos no muy gratos (cosas malas que no son buen material para posts, ¿recuerdan?). Incluso creo que esto se vio reflejado en la poca actividad que hubo por aquí. Y aunque la estela de eventos complicados continua, todo mal termina por acabar. Y es justamente aquí cuando uno tiene la oportunidad de convertir estas experiencias amargas en momentos dignos de recordar. Es difícil y no siempre se puede, pero el intento siempre es bienvenido.

Todo este choro es para informar que en los próximos días (y ya no doy fechas porque no me gusta quedar mal) la vida de un servidor (y por ende, la del blog) atravesarán una serie de cambios (todos buenos, espero y quiero creer). Y así como en las ocasiones anteriores, estos eventos quedarán plasmados en las páginas históricas de este documento digital. Los cambios son buenos, dicen. Opino que aunque no lo sean, es preferible tenerlos a quedarse estático... viviendo en la monotonía y preguntando ‘¿qué hubiera pasado si....?’

Y siempre estará este espacio para informar al resto de la humanidad (y a las razas alienígenas que en un futuro nos conquistarán) nuestros momentos más importantes.