El 8 de mayo de 1984, salió a la venta el primer artículo Transformer de la historia: el #1 del cómic The Transformers, editado por Marvel, con la colaboración de Hasbro, compañía creadora de los robots transformables. Curiosamente, la fecha en portada de aquella historieta correspondía a Septiembre, mes en el cual se estrenaría la serie animada que ayudaría a vender todos esos novedosos juguetes que aparecieron en tiendas durante el verano de 1984.
Aunque ya era posible encontrar Transformers durante la segunda mitad de 1984 en nuestro país gracias a los bazares, la popularidad de estos robots se desató cuando la serie animada llegó a México un año más tarde, en 1985. Un lunes de septiembre a las 8 pm, en canal 13, justo después de la cápsula literaria de Maruxa Vilalta, muchos vimos el primer episodio de la serie, "More Than Meets The Eye, Part I". En ese entonces, tenía 7 años de edad y estaba en segundo de primaria. Y el resto es una gran historia a lo largo de tres décadas de Autobots, Decepticons, Dinobots, Insecticons, Constructicons y Energon. Mucho Energon.
Hoy, los Transformers cumplen 30 años. Sobra decir lo mucho que me gustan y la importancia que han adquirido para mí durante los últimos años. Aunque llevo coleccionando estos robots durante sólo una quinta parte de su existencia, han estado presentes de una u otra forma a lo largo de mi vida. El día de hoy tengo poco más de 1,500 Transformers, representantes de prácticamente todas las series y líneas que han salido desde 1984 en nuestro continente, y algunas más que sólo estuvieron disponibles en Japón. Creo que estas son credenciales suficientes para hacer patente la devoción que siento por estos robots.
Hasta ayer, no se me ocurrió nada especial para celebrar tan importante acontecimiento en este blog. Hoy que entré a La Bóveda, mientras buscaba inspiración entre todo el desmadre que tengo ahí, comencé a recordar todos los momentos de satisfacción, alegría y diversión que he vivido gracias a ellos. Y así, en unos minutos, tenía ya la lista de las 30 mejores experiencias que he vivido con ellos en estos 30 primeros años de Transformers.
Empecemos...
30. Experiencia en Age of Extinction Press Day
A finales de marzo, asistí a un evento en donde nos mostraron 15 minutos de la película Transformers: Age of Extinction, además de tener la oportunidad de entrevistar a los actores protagónicos de la misma. Mientras charlaba con editores y reporteros de diferentes publicaciones, comencé a explicarles quiénes eran los robots que aparecieron en los 15 minutos del avance, su lugar dentro de la mitología TF y teorías acerca de eventos que pasarían en la película. Sin darme cuenta, tenía a gente de Empire Magazine, Variety, Men's Health y demás publicaciones internacionales preguntándome cómo era que sabía todo eso. "Soy coleccionista y un fan bastante enfermito de Transformers", respondí.
29. Bumblebee Deluxe ROTF, cortesía de Hasbro
Durante una de mis visitas a Hasbro México para conocer las novedades que llegarían a nuestro país en el 2009, participé en un sorteo y gané el premio principal, que consistía en muchos de los juguetes que presentaron en esa ocasión. Dentro de todas las cosas que venían en el paquete, estaba un Bee Deluxe de Revenge of the Fallen, el cual tuve en mis manos muchos meses antes de que los juguetes llegaran a las tiendas. De hecho, todo indicó que fui una de las primeras personas en Latinoamérica en tener una figura de esta línea. Todo un honor.
28. Transformers (2007)
Con todo y que ya tenía dos figuras antes del estreno de la primera cinta de Michael Bay, no fue sino hasta después de verla que mi interés en los robots transformables inició el camino del coleccionismo. A diferencia de todos aquellos hipsters amantes de Generations que iniciaron en esto del coleccionismo amando las películas primero y odiándolas después, un servidor no odia ni reniega las películas del Bayverse o las figuras que surgieron a partir de él. Las figuras de las tres películas forman una parte muy importante de mi colección. Para mí, la escena en donde Prime se transforma por primera vez, sigue siendo enorme.
27. Beast Wars: "The Agenda"
Cursaba la preparatoria y la serie animada por computadora Beast Wars (en canal 5) era el único producto TF que consumía en ese entonces. Cuando todos los Autobots y Decepticons eran sólo un recuerdo ochentero (y parte 90ero, gracias a la G2), fue toda una revelación digna de júbilo ver la serie de capítulos que conformaron este arco histórico. Saber cómo estaban conectados el universo BW con el G1, y ver a Optimus Prime dentro de ese episodio después de tantos años de no saber de él fue un momento grandioso.
26. Robots in Disguise / Car Robots
A principios de la década pasada, los Transformers llamaron una vez más mi atención, gracias a la serie Robots in Disguise. A pesar de su alto contenido de japonesadas, mantuvo mi interés a lo largo de toda la temporada que duró. El regreso a los modos alternos vehículares logró que me interesaran de nuevo las figuras TF, hecho que se consumó muchos años más tarde, cuando adquirí a la segunda pieza de mi colección: Sideswipe OTFCC RID. Y bueno, siguió con el fanatismo desmedido que desarrollé por las figuras de esta continuidad.
25. Completar a los Car Brothers y el catálogo Car Robots
Los Car Brothers están entre mis figuras favoritas. Poco a poco, desde que comencé a coleccionar robots transformables, adquirí los moldes y variantes de estos tres hermanos. En septiembre del año pasado, conseguí las dos últimas versiones que me hacían falta para tener absolutamente todos, incluyendo las codiciadas variantes Clear. Gracias a esa misma compra, también adquirí las piezas faltantes del catálogo japonés de Car Robots, convirtiéndose en la primera línea TF que completé.
24. Completar los 3 primeros catálogos Transformer
La que todavía es la adquisición más grande que he hecho (en dinero y cantidad de figuras) dentro de mi coleccionismo, me ayudó a completar de un jalón los tres primeros años de la historia Transformer. Los catálogos de 1984, 1985 y 1986, por el lado Autobot y Decepticon, forman parte de mi colección desde 2010. Lograr esa meta me ha motivado a perseguir completar los años posteriores. Bueno, por lo menos hasta antes de los infames Action Masters.
23. My Transformer Collection: 624 days, 611 robots
Unos días de vacaciones, música, una cámara y mucha paciencia fue lo que necesité para llevar a cabo un proyecto demente: tomar una foto de todos los robots transformables que hasta diciembre de 2009 estaban en mi colección. Hasta el día de hoy, no sé si alguien ha hecho algo similar. Igual y tengo un record o algo, nada más por el hecho de formar a 611 robots para una foto. No contento con la imagen de ellos, grabé el video que hasta hoy ha recibido la mayor cantidad de views en mi canal de YouTube: 260,000.
22. Transformers (1985)
Aprendí a programar la videocasetera (si no saben de qué hablo, pregúntenle a sus papás) gracias a esta serie. Vi todos los capítulos que transmitieron durante todo el tiempo que duró al aire en el Canal 13. Y no me cansaba de verlos una y otra vez en video. Y a pesar de que tuve mi primer Transformer hasta el Día de Reyes del año siguiente, ya era un fan declarado de estos robots alienígenas. Stickers, lonchera, álbum Mundet de estampas, posters y 30 años de imitar sin éxito el sonido de transformación característico, son el legado de esta serie.
21. Sideswipe y Soundwave G1 Commemorative
Mucho he hablado de la primera figura de mi colección. O de las figuras de centena. Pero nunca he mencionado a este par de figuras conmemorativas. Después de que adquirí a Optimus Prime Leader de la primera película, me hice la pregunta que todo coleccionista se hace justo antes de comenzar a coleccionar formalmente: "¿Qué sigue?". La respuesta fue casi inmediata y en minutos estaba en Mercado Libre comprando estos dos, que se convirtieron en las primeras figuras que adquirí con un objetivo claro en mente: recuperar las figuras que tuve en mi infancia y adquirir todas aquellas que siempre quise tener.
20. Mi robot #400
Hasta antes de esta adquisición, no tenía un Optimus Prime G1. En ese entonces buscaba un IGA, como el que tuve cuando era pequeño. No tuve suerte, pero ese mismo año, se festejaba el 25 aniversario de los Transformers y Hasbro lanzó una edición especial del líder Autobot con varios extras llamativos, entre ellos una caja de sonidos con varios efectos sonoros clásicos y frases de Prime, además del comic #1 The Transformers (sí, ese que aparece al principio de esta entrada venía con esta figura). Fue una gran experiencia tener, después de tanto tiempo, a Optimus y jugar con él.
19. Mi robot #2,300
Una leyenda urbana de mi niñez se materializó en 2012 cuando por fin adquirí, nuevecito de paquete, a Kaltor... ¡El mítico robot/reloj/calculadora! Nunca había tenido contacto con uno físicamente. De hecho, hasta que empecé a coleccionar robots en 2008, ignoraba la veracidad de su existencia. Resultó que el rumor propagado en mi primaria sí estaba basado en un hecho real y ahora, soy poseedor de una gran figura ochenterísima en una de sus versiones más elusivas. ¿Ya mencioné que lo conseguí nuevecito?
18. Mi robot #1,800
La historia resumida: Oferté en una subasta que creí que no ganaría. Y la gané. Por mucho menos de mi puja máxima. ¿Y qué gané? Una de las figuras Cybertron/Galaxy Force más chingonas y raras de la historia, repleta de pintura cromada y plástico traslúcido. Por si fuera poco, la caja traía un extra: otra figura de edición limitada. Tan sorpresivo fue el asunto que, ¡ni siquiera el dueño anterior sabía que la figura traía un obsequio!
17. Mi robot #1,300
Durante el último día de un viaje que hice a Brasil, visité el barrio japonés de Liberdade, en São Paulo. Resignado a que no encontraría nada digno de comprar ahí, decidí dar una última checada a una plaza pequeña. En el último piso, en el último local, ahí estaba... esta edición especial de Optimus Prime nueva, esperándome. No recuerdo ahora cuál era su precio exacto en Reales Brasileiros, pero sí recuerdo que el vendedor aceptó sin problema los 100 y pico de dólares que traía en la bolsa. Ese día, fui el mexicano más feliz en todo Brasil. Tengo testigos.
16. Completar a Big Powered
Big Powered es una configuración Transformer que consta de 3 robots. Estos tres sujetos estuvieron disponibles durante la última serie animada G1 japonesa, la cual resultó un fiasco comercial. Nunca se reeditaron y pues ahora son bastante, bastante, pero bastante difíciles de conseguir. Poco a poco, sin clavarme mucho, pude conseguir la versión japo/coreana de Dai Atlas. Años más tarde, me vendieron a Sonic Bomber y meses después, encontré a Road Fire. Así, en 2012, completé a uno de los combiners TF más complicados de la historia. Y por supuesto, hice la danza de la victoria como 15 veces.
15. Mi robot #2,900
Casi estuve a punto de culminar un trato suicida, pagando casi el triple por esta figura. Todo por desesperado e impaciente. Gracias a Facebook, me enteré que un buen amigo estaba por los rumbos de la San Diego Comic-Con del año pasado. Él tuvo la misión de conseguir un ticket para que el último día, fuera uno de los afortunados que pudieron comprar al Metroplex Titan Class SDCC 2013 Exclusive Edition Generations (y al Shockwave Lab, de paso) al precio original. Por cuestiones de espacio, tuve que sacrificar la caja de Metroplex, pero fue un pequeño precio a pagar, después de lo que estuve a punto de desembolsar.
14. Mi robot #1,500
Sin duda, el mejor Combiner G1 fue una gran experiencia. Producto de un excelente trato en eBay, conseguí la figura completa, en excelente estado y a un precio inigualable —con todo y que uno de sus integrantes sufrió los estragos del Gold Plastic Syndrome—. Con Liokaiser G1 completé todos los Combiners G1 que me interesaba tener. Sí, tal vez me falten algunos de los más oscuros, pero no importa; mientras tenga al mejor que se ha hecho, el resto son pura vanidad.
13. Mi robot #2,000
La primera figura Lucky Draw dentro de mi colección ocupó un lugar muy importante. Desató la fiebre que me hizo iniciar la búsqueda de todas aquellas figuras doradas sólo porque sí. Siempre es motivo de asombro y logro personal saber que sólo existen 1,000 como ella en todo el mundo. Y sí, tal vez sea de los LD más fáciles de conseguir. Pero, ¿cuántas personas conocen que tengan a ésta y a su parejita?
12. Mi robot #3,000
Otro producto de un trato turbulento. El Ultimate Optimus Prime Dark of the Moon United Displaycraft Interactive Diorama Display tiene una historia digna de una novela. Lo importante es que al final del día, tengo a una de mis figuras favoritas del Bayverse en una versión muy rara y casi casi desconocida. Por si fuera poco, gracias a ella, Lumiere es hoy un gato sano y molestón. Sólo por eso, todo lo demás valió la pena.
11. Mi robot #4,000
Este año me propuse como meta, y cito: "Adquirir, por lo menos UNA figura única, rara y que sea la primera en su tipo dentro de mi colección". Y lo logré. Hoy soy el orgulloso poseedor del Dark of the Moon Ultimate Optimus Prime San Diego Comic–Con 2011 Exclusive graduado por AFA con la calificación más alta —9.5 Uncirculated— que existe EN EL MUNDO. Sí, no hay otra figura igual o con una calificación así, por lo menos hasta el día de hoy. Las probabilidades de que exista en el futuro una que supere a la mía son casi nulas. Una de mis figuras favoritas, una joya dentro de mi colección y una gran experiencia como coleccionista.
10. Mi robot #365
Después de estar poco más de un mes perdido en el limbo del servicio postal, ya había dado por hecho que uno de los mejores tratos que había realizado en mi historia como coleccionista había terminado mal. Eso fue hasta que recibí una notificación de la oficina postal que me indicó que ahí estaba almacenado, desde unos días antes de Navidad, mi Brave Maximus, el repaint del Transformer más grande que se había hecho hasta ese momento. En aquel entonces, era mi adquisición #365, con la cual celebraba mi primer año de coleccionismo.
9. Mi robot #1,100
Antes, mucho tiempo antes de que FortMax fuera mainstream, tenerlo era un gran logro como coleccionista. Hoy en día, tener un Fortress Maximus G1 primera edición es un gran logro para cualquier coleccionista y un emblema indiscutible de verdadera devoción. Tener a la primera figura en la historia TF en superar la barrera de los 100 dólares, y aquella que durante poco más de un cuarto de siglo mantuvo el record como el Transformer más grande que se ha hecho, fue una gigantesca experiencia TF.
8. Mi robot #100
Optimus Prime Masterpiece no fue la primera opción para convertirse en mi figura #100. En su momento, existieron varios candidatos que contendieron para ocupar el espacio de primer figura de centena ever. Después de pensarlo mucho, decidí que este Prime era idóneo para ese puesto. ¿Por qué? Cuando lo tuve en mis manos, fue la primera figura con la cual pensé: "Esto no terminará pronto. Esto acaba de empezar".
7. Mi robot #500
La adquisición del Victory Saber Giftset marcó una etapa muy importante dentro de mi coleccionismo. Gracias a ella, decidí que mi fanatismo por los robots transformables siempre debería estar en la búsqueda de cosas nuevas, alejadas de la zona de confort del Universo Transformer conocido. Después de VS, surgió mi interés en elementos tal vez no tan convencionales dentro de los TF y, subsecuentemente, totalmente ajenos a ellos. Sin Victory Saber, no habría Braves, Sentai, Chogokins o todo lo demás. Victory Saber representó para mí, la apertura a la experiencia con figuras desconocidas.
6. Completar la Takara Collection
La más elitista, completa y espectacular serie de reediciones Transformer fue completada el verano del año pasado. Después de varios años de adquirir varias piezas por separado, un megalote con todas las que me hacían falta (y algunas repetidas) me ayudó a alcanzar la meta. Es impresionante la sensación de tenerlas todas, de abrir las cajas tipo libros y pasear entre las páginas del legendario catálogo. Y a pesar de que no he tenido tiempo de abrir y transformar muchas de ellas, no me ha faltado tiempo para contemplar su infinita magnificencia.
5. Gran Caja G1
Por mucho, el mejor lote de figuras que he adquirido en toda mi historia como coleccionista. Dudé mucho para comprar aquella enorme colección que apareció a la venta en eBay. La experiencia de abrir una gigantesca caja en donde venían 135 figuras G1 fue incomparable. Ninguna compra masiva que haya realizado después se puede comparar a la experiencia que viví durante aquellos días del 2010. Esa adquisición todavía tiene el record de la mayor cantidad de figuras adquiridas de un golpe. Y la verdad, dudo poder superarla algún día.
4. Mi primer Shockwave G1
Una inocente subasta en eBay por un Shockwave Binaltech nuevo prometía un "regalo sorpresa" si la puja superaba cierta cantidad. La gané superando la cantidad meta por un puñado de dólares. ¿Cuál fue el regalo? Pues nada menos que un Shockwave G1. Sí, estaba usado, con un poco de daño en la manguera y algunas marcas de guerra. Pero fue un regalo. Y dudo que el vendedor supiera que Shockwave G1 fue el primer Transformer que vi, meses antes del estreno de la serie de TV en nuestro país, además de ser el personaje que encabezaba la lista de los Transformers que siempre quise tener y no tuve. ¿Necesito decir qué tan especial fue para mí?
3. Mi robot #300
Con el TRU Japan Exclusive Car Robots God Fire Convoy Clear Giftset with Super God Sword (sí, ese es su nombre completo) fue la primera vez que el dinero no importó. Era la figura que conocía y me había maravillado mucho tiempo antes de contemplar la idea de coleccionar Transformers. Conseguirla nueva, esperar su llegada y por fin tenerla fue una gran experiencia Transformer. Esta figura representa para mí el hecho de que ninguna figura es imposible de conseguir. Y siempre será una de mis favoritas. Siempre.
2. Doubledealer G1
La primera figura de una colección siempre será especial. Eso es obvio. La primera figura de una colección dice mucho del tipo de coleccionista. Nunca me cansaré de decir que Doubledealer es uno de mis Transformers favoritos de todos los tiempos. Cuando lo volví a adquirir a principios del 2007, toda una oleada de recuerdos llegaron a mí. Además de su fantástica historia, el asunto de ser Autobot y Decepticon y, por supuesto, el increíble diseño de la figura, Doubledealer es una gran experiencia para mí porque fue mi Transformer favorito cuando era niño. Y uno de los mejores juguetes que he tenido en mi vida.
1. Mi robot #1,000
La historia está en el link. No creo que sea necesario contar más. Tal vez en su momento, no sabía que el increíble reloj transformable que tuve durante los primeros años de primaria tenía mucho que ver con los Transformers, pero cuando lo supe, todo el valor que tuvo en algún momento para mí adquirió mayor sentido. Este robot fue lo que definió todo lo demás. Ninguna adquisición, figura o evento podrá compararse a la extraordinaria experiencia de ver por primera vez a un objeto ordinario convertirse en robot. Sin el Takara Kronoform Robot Time Machine no existirían, 30 años después del nacimiento de los Transformers, más de 2,000 robots transformables en mi casa. Y nunca, nada, podrá compararse con la primera experiencia.
8 de mayo de 2014
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2 comentarios:
Comparto varias de esas experiencias. Excelente artículo, ¡gracias por compartir!
Excelente remembranza! Ser coleccionista de Transformers es lo mejor! Y la verdad se cosechan muchas historias interesantes en el camino.
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