Alguna vez leí un post en Facebook acerca de un asunto inherente a los productos fabricados por las Third Parties, Thirdies o Terceras Compañías. Parafraseando la entrada, todo se resumía en un ejemplo de doble situación con una pregunta final para el lector:
a) Cuando una figura retail de Hasbro/Takara tiene algún error de diseño o fabricación, o simplemente alguna decisión que, a simple vista pareciera equivocada, los fanáticos expertos coleccionistas la masacran con opiniones, quejas y maldiciones.
b) Cuando una figura Third Party comete alguno de los pecados anteriores, todo se minimiza, se habla de la loable tarea de estas compañías y de su esfuerzo al fabricar figuras que Hasbro/Takara nunca se atreverá a hacer.
¿Por qué?
Simple: porque a nadie le gusta que le digan 'pendejo'.
Elaboraré:
En numerosas ocasiones he externado mi opinión acerca de las Thirdies. La primera que vino a mi mente para ejemplificar fue justo la que giró en torno al Battle Rollar, que no fue mi primera adquisición de una TC, pero sí una de las primeras que englobó en su momento la opinión que mantengo hoy en día de todo este asunto. Si tuviera que fijar mi postura en una sola oración, sería la siguiente: No tengo nada en contra de las Terceras Compañías, si me gusta la figura, aporta algo creativo al hobby y el precio es bueno, me la llevo.
En la imagen están los dos elementos de la línea TrailerForce, creados por Xovergen. Y ambos son la prueba tangible de cómo mi postura ante las Thirdies se mantiene firme en lo elemental, aunque los productos pongan a prueba los límites de la objetividad.
Xovergen lanzó en 2013 el primer set, el TF-01 Masterarmor (#2,820), un add-on cuyo objetivo principal era darle al molde de Optimus Prime Classics las propiedades y características que tuvo el Powermaster Prime G1. En 2015, lo esperado (y obvio) sucedió: esta misma compañía puso a la venta el TF-02 Godarmor (#2,821), set secuela que complementa la idea del primer paquete, incorporando a la ecuación un personaje/armadura adicional, al igual que lo hizo en su momento Godbomber en la G1 a fin de crear a God Ginrai (o la Apex Armor para el Powermaster Prime, si prefieren la nomenclatura norteamericana).
¿Consiguieron su cometido? Sí. ¿Las disfrutarán todos los coleccionistas de Transformers? Depende de qué tan fans sean o no de God Ginrai. ¿Son un ejemplo de cómo las Terceras Compañías hacen figuras mucho mejores que Hasbro/Takara? ¡Ja ja ja ja!, no. Pero ni remotamente cerca. ¿Las recomiendo? Si van a pagar lo que yo pagué, tal vez. Si es menos, adelante. Si es más, ni se acerquen. Aléjense y gasten todo ese dinero en gorditas de nata. Me lo agradecerán.
Les diría que, para no entrar en cansados detalles, fueran a visitar a su reviewer de confianza para que les hablara acerca de todos los puntos buenos, pero sobre todo de los malos que abundan en estos dos sets. Pero ahí radica justo el problema con las Terceras Compañías: los reviewers están impedidos para realizar valoraciones objetivas cuando están frente a una Thirdy. No digo que todos, pero me atrevería a decir que sí el 99%.
"Uf, seguro mi reviewer de cabecera forma parte del otro 1%, ¿verdad?". No lo sé, chavos. Si es de esos que acostumbran sacar una reseña en video opinando como experto en menos de 24 horas tras recibir la figura, me temo que es parte del problema.
Para darle sentido a esta entrada —y, todavía más importante, utilidad— tengo que hacer algo primero: dar mi opinión breve y concisa de los TrailerForce. Entonces, empezaré con el TF-01.
Buen plástico en la mayoría de los componentes, sobre todo en las armas y el tronco de la figura. Varias articulaciones están en juntas de matraca con buen agarre y aquellas que no, tienen balljoints decentes. Aunque el instructivo explica foto por foto (en blanco y negro) cada paso del proceso de transformación, no es muy complicado debido a la herencia Prime en la idea central. Los colores son buenos y el modo robot es, en definitiva, muy fiel a la idea Powermaster Classic que se pretendía lograr. Como adicional, puedes usar otros Primes (Clásico G1 y Powermaster G1) en sustitución del Classics, además de que puedes prescindir de todos ellos para crear el modo robótico, pues cuenta con una simple pieza que sustituye el pecho.
Y ahora, lo malo. Mmmmhm, veamos... El modo trailer es pésimo, cero fiel a la idea Powermaster. La cubierta del remolque es bastante mediocre, y algunas de las armas son una idea que no debió existir. Las cubiertas de los antebrazos tienden a separarse y, al igual que la cubierta mencionada, no se sienten hechas con plástico de la misma calidad que el resto del set. El modo "base"parece una idea improvisada. Y en serio, hay un pedo de uniones severo, severísimo, que evita mantener el modo remolque bien transformado.
Sigamos con el TF-02. Me gustó el modo robótico. El arma gigante formada por dos rifles más pequeños luce muy bien. Tanto la forma, como la paleta de colores empleada son un digno, aunque diferente, homenaje a Godbomber. Tiene buenas articulaciones, sobre todo en las piernas y pies. Y no esperaba que la figura fuera tan robusta, casi del mismo tamaño que el TF-02 transformado. Tiene las dimensiones de una figura Leader TF de fechas recientes. Y la fusión final crea uno de los robots más imponentes y fotogénicos con los cuales haya tenido contacto en los últimos años.
Y ahora lo malo. ¿Por dónde empiezo? No, en serio, ¿por dónde putas empiezo? El modo alterno es malo, no tanto como el Masterarmor, pero raya en lo tibio. El plástico, en la mayoría del robot, se siente de dudosa calidad, inferior al TF-02. El instructivo es el PEOR instructivo en la historia de los PEORES INSTRUCTIVOS DE LA HISTORIA. Hay decisiones entre dudosas y malas en cuanto a las alas, las partes para la fusión con Masterarmor y los métodos empleados para mantener las piezas en su lugar. Pero tal vez el pecado más grande es que, con todo y que el TF-01 ofrece la opción de utilizar a varios Optimus para formar el robótico, NINGUNA FUSIÓN PARA GINRAI ES POSIBLE UTILIZANDO ALGUNO DE ESOS PRIMES. Así es, ni el Classics, ni el Clásico G1, ni el Powermaster original entran en la fusión. Es más, ni siquiera es necesario un Prime. Pero espera, puedes usar a tu Masterpiece MP-10 para una fusión porque alguien pensó que sería una buena idea cambiar el centro de la idea original de un set TrailerForce a otro. Eso que debería ser un extra bueno, termina siendo algo negativo.
Esto chavos es, a grandes rasgos, mi opinión.
¿Me costó trabajo opinar y escribir las líneas anteriores? Además de intentar mantener todo breve, resaltando los puntos más críticos (tanto buenos como malos), no mucho. Si yo pude, ¿por qué vergas los acólitos de las Thirdies no pueden?
Les explico de nuevo: porque a nadie le gusta que le digan 'pendejo'.
Digamos que un día van al supermercado y se topan con una figura Transformer Deluxe de uno de sus personajes favoritos, perteneciente a una línea nueva, acabadita de salir. No han visto reseñas, sólo una que otra foto online, y eso bastó para que desearan tenerla desde hace meses. ¿La compran o no? Me atrevo a decir que bajo estas condiciones hipotéticas, un altísimo porcentaje de lectores la compraría. Ahora bien, llegan a casa, la abren, y notan que en el modo alterno las piernas no se quedan en su lugar. En el modo robot, uno de los brazos se cae con frecuencia de su joint.
¿Qué pasa luego? Se encabronan y como buena turba iracunda, sacan trinches y antorchas para disponerse a quemar online a Hasbro por lo terrible que resultó esa figura Deluxe.
Oye, ¿y cuánto te costó la figura? "400 pinches pesos. Hijos de puta. Pinche robo", responden.
Otro día, tocan el timbre y es el sujeto de Mexpost. La caja que esperaron impacientemente durante un mes por fin está en su sala y no caben de la emoción porque esa figura de su personaje favorito, hecha por una Tercera Compañía, por fin está a un cutter de distancia de sus manos ansiosas. La desempacan y babean, contemplando la enorme caja llena de jeroglíficos (que en realidad es chino que no entienden) y una que otra palabra en engrish (o inglés oriental de dudosa etiqueta). La abren y comienzan a disfrutar su figura que, de entrada, ya trae 3 o 4 raspones en algunas partes cromadas. Pero no hay fijón, porque lo que cuenta va más allá de los detalles. El modo alterno es majestuoso, lleno de detalles y colores vibrantes. Claro, salvo esas partes en donde la pintura salpicó una parte que no correspondía o esa otra que de plano ni pintada llegó. Comienzan a transformarla y notan que una de las articulaciones de los brazos es dura como la directora de su prepa, mientras que la otra es frágil, como su maestra de kinder. Y cuando por fin logran entenderle al instructivo y completar la transformación, llegó la hora de presumir la adquisición con un video en Youtube o una buena sesión de fotos en Facebook.
Después de esa ardua labor, llegó el momento de exhibir la figura. La colocas en una pose heroica en tu repisa y... ¡zaz!, el peso del tronco es demasiado para las articulaciones de las piernas y la figura cae de espaldas. Nada grave, nada roto a simple vista, pero una de las piernas suena raro, como que la matraca del joint se tronó. Peor que padre primerizo, corres a Internet para ver qué se puede hacer y te enteras que la figura sufre un problema de diseño que truena la articulación de las piernas por el peso, pero la compañía lanzará un kit gratuito para que arregles el desperfecto. Obvio, te pones en contacto con tu dealer chino para que te mande ese kit, y te dice que lo hará con gusto, aunque tendrás que pagar el envío, porque eso no depende de él. Al mes llega tu paquete y te dispones a arreglar tu figura. ¡Misión cumplida!
Pero para no jugarle al vivo, mejor la guardas en su caja para evitar que algo más le pase a tu inversión. Al transformarla, te das cuenta que una de las pestañas sujetadoras y un peg de control no quieren hacer lo propio y le aplicas un poquito más de fuerza. Ups, demasiada fuerza y ya desprendiste una de las alas de su bisagra. Internet una vez más es tu salvador al informarte que se trata de un problemilla común con la figura. Esta ocasión no hay kit para arreglarlo, sólo hay fixes que los coleccionistas han creado para mantener el ala bien sujeta el cuerpo. Ya con miedo a transformarla, mejor la guardas y exhibes la cajota que tan orgulloso te hace sentir.
¿Qué pasa luego? Te encuentras a un colega coleccionista, quien conocedor de los problemas que padeció el producto, te pregunta qué tal te fue con tu figura. "La mía tuvo detallitos mínimos, pero es una joya. Una de las mejores piezas en mi colección".
Oye, ¿y cuánto te costó la figura? "4,000 pesos. Pero valió cada centavo", responden.
¿Notan la diferencia?
Entiendo que hay reviewers que reciben figuras cortesía de tiendas y compañías para revisarlas. Eso los obliga a ser más benevolentes por una razón obvia de compromiso. Eso está mal, pero OK, ni modo, sucede. Pero, ¿qué hay de aquellos que pagan por sus figuras? ¿Qué los obliga a ser tan incongruentes con sus criterios de evaluación?
Yo lo llamo el Rush del Arrepentimiento Hipócrita; emoción por tener la figura, seguida por la desilusión de enfrentarse a la realidad de que la figura está muy alejada de la perfección, culminando con la negación bañada en una chaqueta mental que genera las omisiones y mentiras. Todo esto alimentado por el pesar generado directamente por el costo de la adquisición. Porque recordemos, las figuras de TC no son baratas, de hecho, muchas navegan en los cientos de dólares cuando son lanzadas al mercado. Entonces, entre más costoso el robot, más intensa es la sobada mental de su supuesta perfección. Es muy obvio —y hasta divertido— ver videos o leer reseñas en las cuales se minimizan problemas que serían pecados capitales en una figura Deluxe o Legends Hasbro/Takara. Y entre más costosa la figura de una Tercera Compañía, más laxa la crítica.
El trabajo de Xovergen dista mucho de ser perfecto. Pero muchísimo. De hecho, no es ni siquiera consistente en su intento; así como hay elementos muy buenos en un set, esas mismas características se desploman en el otro. No hay fallas constantes, todas parecen nadar en un mar de aleatoriedad. Carajo, ni siquiera el empaque mantiene la misma idea. Mientras que el TF-01 trae todo bien empacadito en sus charolas plásticas, con instrucciones gráficas austeras, pero cumplidoras, el TF-02 es un festín de bolsas de celofán mal acomodadas, con partes confusas y una mierda a la que me cuesta trabajo llamar 'instructivo'.
Neta, vi reseñas que elogian los empaques de Xovergen y así venían los componentes, peor que producto Lego de imitación, novedad y temporada para el niño la niña, llévelo, llévelo. El Rush del Arrepentimiento Hipócrita trabajando horas extras, les digo.
No me considero un experto en el mercado de las Terceras Compañías. De hecho, un recuento rápido me hace calcular que tal vez alrededor del 3 o 5% de mi Colección tiene figuras de este origen. Pero sí tengo MUCHA experiencia en robots transformables. Si necesitan el dato curricular, poco más de 2,900 figuras en mi posesión me respaldan, chavos ;)
Esta experiencia tal vez me facilita ser más crítico y objetivo con mis juicios. No gano nada al recomendar o hablar bien de una figura mala; no me las regalan, las compro con mi dinero, como la gran mayoría de los coleccionistas. No pierdo nada al decir la verdad, porque en el pasado he criticado detalles de figuras de todos tipos y orígenes y no se me ha caído el pelo o me ha salido una verruga. Y aunque soy partidario de que incluso las peores figuras tienen algo positivo, sé que mucha gente se guía por la opinión de quienes tenemos antes la figura y eso exige la responsabilidad de dar una opinión veraz.
"Y si los Xovergen tienen tantos puntos negativos, ¿por qué chingados los compraste?". Tengo tres razones para justificar mi compra.
La primera y tal vez más importante: soy fan enfermizo de God Ginrai. Es mi molde de Optimus G1 favorito, incluso más que el clásico. A lo largo de estos 9 (casi 10) años de coleccionismo, me he dado a la tarea de cazar todo lo que tenga que ver con esta versión de Prime. Por ello, para mí, aunque no era una compra obligada al ser un producto de una TC, sí era algo que estuvo en mi radar desde que salió al mercado.
La segunda fue el precio. Adquirí el combo TrailerForce en el pasado ToyFest realizado a principios de septiembre y, aunque el vendedor aseguró que eran nuevos ("sólo se abrieron para revisarlos"), la verdad es que todavía tengo mis dudas. Con el TF-01 pude creer esto, pues incluso la bolsa con el instructivo y la tarjeta de personaje venía sellada, y varias articulaciones tenían esa rigidez característica de las figuras nuevas, pero el desmadre de bolsas y piezas del TF-02 me hizo dudar de todo, aunque dándole el beneficio de la duda al sujeto, he visto unboxings de este set y parece que el desmadre viene así de fábrica.
En el momento de su lanzamiento, ambos sets rondaron la zona de los 200 dólares CADA UNO. Y pues por aquí esos tratos no proceden. Su precio ha disminuido y aumentado, pero digamos que de la zona de los 100-150 no han salido en los últimos 2 años. Pagué cerca de 150 dólares por los dos. Nuevos o no, ese es el precio que consideré justo y, después de pasarme un fin de semana disfrutando lo que tienen que ofrecer, pagar un dolar más me hubiese parecido una atrocidad.
Y la tercera razón...
Porque la fusión es una chingonería. Por lo menos para la foto del feis y para las repisas. Tal vez todo alrededor de ella grite "¡PELIGRO! ¡GUARDA TU DINERO!", pero el final del recorrido es un momento grandioso que deja una buena imagen. Entonces, esto último, sumado a que soy fan del personaje y me costó menos de la mitad de lo que hubiera pagado por los dos sets cuando recién fueron lanzados, hicieron que todo lo anterior valiera la pena, PARA MÍ. Hincapié en esto último, por favor.
Ahí están, TRES razones TRES para justificar una compra de una Tercera Compañía: que te enloquezca el personaje en el cual está basado la figura, que el precio sea el justo por ella y que exista algo que haga que la experiencia valga la pena. No es una ciencia o decreto religioso, pero es el criterio que me ha funcionado para ser mucho más discrecional con este tipo de adquisiciones.
Y así como despotriqué contra ésta, seguiré hablando maravillas del Scouting Force X o dando mi opinión crítica de los desaciertos del Hegemon, de ToyWorld, porque de eso se trata: de dar una opinión con fundamentos, no de lanzar juicios cegados por el rush de un arrepentimiento hipócrita. Al final, sí hay consecuencias, porque el daño a largo plazo es para el hobby. Pero creo que esto tristemente seguirá sucediendo porque, ¿saben cuál es la diferencia entre gastar 400 pesos en una figura Hasbro/Takara que muy probablemente tendrá detalles, y desembolsar 4,000 por una de Terceras Compañías que, con toda seguridad, tendrá problemas?
Que con la primera, la gente dirá: "Bueno, por lo menos sólo perdiste 400 pesos". Pero con la segunda, les dirán: "¿¡¿GASTASTE 4,000 PESOS EN UNA THIRDY QUE NO ES BUENA, A PESAR DE QUE TODO DEL MUNDO SABE QUE SIEMPRE TIENEN PROBLEMAS DE DISEÑO, MATERIALES Y CONTROL DE CALIDAD?!?".
Y créanme chavos, a nadie le gusta que le digan 'pendejo'.
Objetivo: Alcanzar los 300 Primes transformables en mi Colección.
El TF-01 Masterarmor es una figura más que abona a esa meta.
Restan 6 Primes para cumplir el objetivo.
26 de octubre de 2017
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1 comentario:
Tienes toda la razón del mundo. Es como cuando salió el Apollyon de X-Transbot. Era la octava maravilla y había que pegarle a Hasbro porque su Megatron masterpiece no le llegaba a los talones. Cuando un tiempo después otras 3eras compañías sacaron sus versiones del Megs todos salieron a decir que apollyon era en realidad un pedazo de basura. Y al final Hasbro sacó un nuevo masterpiece y todos se volvieron basura. El rush del arrepentimiento.
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