Llegamos al final del conteo. Después de un nostálgico viaje por la década pasada, llegó la hora de nombrar a los cinco miembros del cuadro de honor. Ya sea que los conozcan o no, vale la pena darles una checadita, si es posible, para pasar un rato agradable. Sangre, gusanos, espadas, explosiones y mundos virtuales aguardan adelante. Y en la posición #5 tenemos a... 5.- Splatterhouse 3
Género: Acción/Golpealos a todos
Año: 1993
Desarrollador: Namco
Distribuidor: Namco No fue el primer título de terror que jugué (Friday the 13th, NES), tampoco fue el más complejo (D2, Dreamcast) o el que tenía la mejor historia (Silent Hill 2: Restless Dreams, Xbox). Simplemente es uno de los más emocionantes y divertidos que existen. Punto. La segunda parte, también para Genesis, era una historia sidescroller con más gore que Evil Dead. Para la tercera parte, Namco se voló la barda y multiplicó todo lo bueno por 10, al convertirlo en un Beat’em up con mucho más que ofrecer que el clon promedio. La historia gira en torno a Rick, ex portador de una máscara maldita que le dio poderes sobrenaturales para descender al averno y rescatar a su novia. Varios años después, su vida suburbana aburrida se ve interrumpida cuando cientos de demonios y apariciones asaltan su hogar para raptar a su hijo y a su ahora esposa. Tu misión es repartir puñetazos, patadas y llaves que desafían la gravedad para abrirte paso entre la enorme mansión y rescatar a tus seres queridos. Todo lo anterior en un baño de sangre, sesos y criaturas infernales. Splatterhouse 3 hace tantas cosas bien que es difícil elegir su punto más valioso. Para empezar, siempre tienes la posibilidad de elegir el desarrollo de la historia, gracias a la capacidad de seleccionar el camino que debes recorrer dentro de la casa. ¿Debes ir primero a la cochera donde se escucharon ruidos o te lanzas a derrotar al Mid-Boss en la sala antes de que se ponga peor la situación? Alternativas como ésta aumentan el valor de la aventura. Además, las referencias a cintas de terror B abundan y las secuencias cinemáticas con actores reales le dieron ese toque tan especial a este título. Por si fuera poco, los finales múltiples (que dependían de las decisiones tomadas) y un sistema de pelea consistente lo hacen una joya. Garantizado: te hará brincar del asiento, no por el miedo, sino por la emoción.
Momento clave: Sin afán de echarle a perder las sorpresas a los que no lo hayan jugado, sólo los invito a ver la excelente secuencia introductoria. Llegará un momento de la historia en el que tendrás que tomar una decisión muy importante, y pelear por ella...
4.- Earthworm Jim 1 & 2
Género: Acción/Plataformas/Disparos
Año: 1993
Desarrollador: Shiny
Distribuidor: Playmates Interactive
Primero, una aclaración: manejo esta dupla como un solo juego, ya que los catalogo al mismo nivel. Elegir cuál de los dos es el mejor, hubiera implicado retirar a un título de la lista y la verdad no se me antojaba. El caso es que ambos son una excelente apuesta para el que busca diversión (en caso de que no los hayas jugado en su momento). Siendo honestos, el juego tenía pocos elementos innovadores para el género de las plataformas, era el estilo visual de la historia, los niveles y los personajes lo que hace a la dupla tan atractiva. El primer juego tomó prácticamente a todo el mundo por sorpresa por muchas razones. Primero, era un titulazo hecho por una novel empresa (con un sujeto medio de renombre) que resultó ser tan bueno, que de inmediato Nintendo se puso las pilas y se agenció la creación de una versión para SNES. Segundo, era portador de un humor acidito y gráfico poco visto en las consolas. Muy al estilo de MAD, Ren & Stimpy o Beavis & Butthead, Jim se burlaba de prácticamente todos los clichés que abundaban en el mundo de los videojuegos. Incluso de él mismo. Al sumar la mentalidad irreverente del universo del gusano a un sistema de juego preciso, con excelente control y una animación digna de premios y reconocimientos, EJ se convirtió en un clásico instantáneo.
Para la segunda parte, Shiny y su lider David Perry fueron más allá de los ácidos que seguramente desayunaban a diario para crear una experiencia más extensa, con más elementos innovadores y niveles que hoy le darían una madriza a títulos 2D para plataformas portátiles de quesque última generación. Además de incorporar nuevos personajes, más cuadros de animación y una pista sonora que hasta la fecha, todavía me hace reir, la secuela vino a complementar lo establecido por la primera parte: un título exitoso no tiene que hacer una cosa bien. Tiene que hacer MUCHAS cosas bien. Jim lo hizo, al brindarnos humor, gráficos bien animados, excelente diseño de niveles y música... inesperada. Desde su aparición, Earthworm Jim garantizó su aparición en todas y cada una de las listas de ‘mejores videojuegos’. Así de cabrón.
Momentos clave: Justo al empezar el primer nivel de la primera entrega, utilizabas tu cabeza/látigo para completar el Cow Launch. Evento que no tenía sentido... hasta que llegabas al final del juego. El nivel de la salmandra de EJ2 será recordado eternamente por su emotiva interpretación de Claro de Luna. Ambos, momentos insuperables en la comedia digital.
3.- Shining Force II
Género: RPG
Año: 1994
Desarrollador: Sega
Distribuidor: Sega
Cuando todo el mundo imitaba a Square y su tediosita fórmula RPG, Sega se atrevió a pedirle más al videojugador. ¿Por qué conformarte con controlar a un grupo de 4 mugrosos en peleas aleatorias cansadas, cuando podías controlar a una docena de valientes guerreros en peleas épicas contra decenas de enemigos en el campo? Bajo esta premisa, la serie Shining evolucionó al que hoy, sigue siendo uno de los mejores exponentes de los RPG estratégicos que se han hecho. Y su fórmula fue tan buena, que Final Fantasy Tactics retomó muchos de los elementos vistos años atrás en Force II. El mundo entero es un terreno abierto para que explores, encuentres, compres, reclutes y vivas la aventura. La historia de cómo un grupo de ambiciosos desea resucitar a un antiguo demonio guerrero es bien llevada a lo largo de las poco más de 70 horas que dura el juego. Y el grueso de ese tiempo no lo pasarás deambulando en calabozos aburridos o peleando contra el mismo tipo de enemigo una y otra vez. Todo ese tiempo lo pasarás organizando, planeando y peleando en el campo de batalla, en donde se desarrollarán combates épicos que pueden durar horas.
A diferencia de símiles para PC o consolas de la época, Shining perfeccionó la idea combativa de la serie Super Robot Wars, al colocar a los personajes en un terreno cuadriculado, donde los turnos eran prácticamente movimientos y ataques onda ajedrez. Los centauros, podían desplazarse más lejos que los arqueros, por ejemplo. Pero estos últimos tenían un rango de ataque mayor a distancia. Considerar los efectos del terreno en tus guerreros es vital para salir avante. Para agregarle el toque anime, cada ataque cambiaba la perspectiva aérea por una vista isométrica animada de cada ataque, que para la época, era fenomenal. Las diferentes clases que con base en su experiencia podían ser promovidas para darle a los combatientes habilidades diferentes era una meta tácita que obligaba a los más dedicados a explorar todas las opciones mágicas y de ataque de los personajes. Shining Force II es la razón por la cuál espero Shining Force Feather para DS con tanta ansiedad.
Momento clave: hay varios pasajes de la historia en donde exploras leyendas multiculturales, como las figuras de Nazca, la leyenda del Kraken, entre otras. Una de las que más recuerdo es cuando por azares del destino, tienes que ganar una batalla de ajedrez... contra piezas mortales en un tablero.
2.- Contra Hard Corps
Género: Acción/Disparos
Año: 1994
Desarrollador: Konami
Distribuidor: Konami
Cuando los fans del SNES no podían estar más seguros y orgullosos de ser poseedores del mejor ‘Contra de la historia’ (The Alien Wars), Konami dio una sorpresita. Cuatro personajes seleccionables, cada uno con un set de armas diferentes y habilidades propias, una historia con múltiples caminos y finales, además de las mejores peleas contra jefes que se han visto en un shooter, eran solo algunos de los mejores detalles que portaba Hard Corps. Tenía todo lo que un amante del añejo juego podía buscar: valor para rejugar, peleas intensas, dificultad endemoniada, música emocionante y gráficos alucinantes. Hard Corps era el juego sadomasoquista por excelencia. Si fallabas por un pelito en un patrón de disparos o un salto sobre el vacío, morías y tu esfuerzo de horas se iba a la basura. Pero a pesar de la humillación y la frustración, regresabas por más, simplemente porque sabías que era posible ser perfecto y ganarle a ese estúpido jefe. Esa sensación es única de Contra y Hard Corps la llevó al límite con todas las cerezas que colocó en el pastel de plomo.
La historia se desarrollaba en un futuro donde existe un estado de alerta civil ante constantes ataques de robots fuera de control (aparente) que comienzan a causar destrozos. Tu misión es detenerlos a toda costa y encontrar al causante de los ataques. Durante el trayecto, podrás seleccionar entre varios caminos que te llevarán a niveles diferentes y a un desenlace único. Recuerdo cuando leí la estupenda estrategia de la ya difunta revista Video Tips, gracias a la cuál me volví un maestro con Brownie. Al entender la psique del juego, pude evolucionar y entender la lógica detrás de cada salto y disparo. Digamos que como Neo, fui capaz de ver el código y convertirme en el amo y señor de uno de los mejores títulos de acción que el mundo ha visto.
Momento clave: Hasta el día de hoy, el primer nivel de Hard Corps es uno de los más intensos y explosivos que he visto. Es una muestra de cómo se puede hacer un título emocionante aunque la mecánica ya esté muy vista. Tiene que venir en los libros de texto Videogame Design 101. Es imperativo. Y lo mejor es que la emoción nunca disminuye. De hecho, siempre va a la alza.
1.- Shadowrun
Género: Acción/RPG
Año: 1994
Desarrollador: FASA/BlueSky
Distribuidor: Sega
Tu misión es simple: obtener evidencia incriminatoria que liga a una compañía multinacional con una secta de mutantes contrabandistas de armas. La paga es muy buena y te permitirá continuar con tu plan. Necesitas tu deck para conectarte a una terminal dentro del edificio de la empresa y entrar al cybermundo para romper los firewalls y adquirir la información en el menor tiempo posible. Logras entrar sin ser detectado por un acceso clandestino. Te conectas y para tu sorpresa, todo es más sencillo de lo que piensas. Pero justo un nodo antes de llegar a la meta, un nuevo programa antivirus hace pedazos tu mejor programa de hackeo y detona la alarma de las instalaciones. Despiertas de tu conexión virtual y revisas las 12 balas que hay en tu arma. No te preocupa que la salida esté bloqueada o los 20 guardias que van directo a la habitación donde te encuentras o las 4 docenas que vienen en camino como refuerzos. Tu principal preocupación es que tendrás que llegar al piso donde está el controlador de seguridad para entrar de nuevo a la red y robar el archivo por el que veniste. No hay otra opción.
Momentos así son los que colocan a Shadowrun en el salón de la fama de los videojuegos. Cada misión, por simple que parezca, se convierte en la más importante de tu vida y adquirir el equipo necesario para lograrlo es sólo una tercera parte de la tarea. La segunda consiste en entrar y lograrlo, mientras que la tercera será salir vivo. La historia principal está ubicada en el Seattle CyberPunk del futuro, donde las Corporaciones hojaldras típicas controlan la vida de los habitantes acostumbrados a sus vidas grises. Abundan los runners, sujetos que realizan encargos para ellas. Y están los Shadowrunners, sujetos que toman trabajos con objetivos fuera de la ley para obtener créditos y comprar armas y elementos defensivos para sobrevivir contra las fuerzas de la ley y la mafia. También sirven para mejorar los implantes biónicos que permiten conectarte a The Matrix, un mundo digital donde tu avatar combate con todo tipo de programas con el objetivo de infiltrarte y obtener información valiosa. Esto es Shadowrun, un RPG de acción con una oscura historia en un decadente mundo lleno de coloridos personajes.
Al tener un sistema de progreso libre, tienes la opción de elegir el tipo de misiones que quieres completar y por supuesto, cómo quieres completarlas. ¿Necesitas robar unos documentos dentro de una oficina de un edificio? Puedes entrar a punta de balazos y depender de tu resistencia física o bien, conectarte a un ATM para infiltrarte en la red de la empresa y desactivar las alarmas de la puerta trasera o utilizar poderosos hechizos para inhabilitar a los guardias de seguridad. Todas las decisiones son tuyas y tú determinas el ritmo con el que desenvuelves la trama principal. Esa es la libertad que brinda Shadowrun. Un título que pide a gritos una versión actual digna que haga honor al juego de rol de donde proviene -y a cuyo universo me hice adicto gracias al juego de pluma y papel-. Una aventura que te inyecte tensión verdadera por trabajar bajo las sombras y te de la satisfacción de recibir puntos de karma por un trabajo bien hecho. Mientras esa versión llega, siempre será emocionante visitar las solitarias calles de aquel mundo para cumplir una tarea más.
Momento clave: La emoción de vencer a un programa en The Matrix con mayor nivel que tú no tiene precio. Bueno, sí lo tiene. Ese lo determina tu contratista, siempre y cuando regreses con los archivos requeridos.
Espero que les haya gustado. Fui muy feliz recordando los viejos tiempos. Si tienen alguna sugerencia sobre cuál debería ser el siguiente Top, avísenme.
—25 al 21— —20 al 16— —15 al 11— —10 al 6— —5 al 1—
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