Ayer cumplí 2 años en mi trabajo actual —en realidad, fue el primero de Junio, pero cayó en domingo—. Han pasado muchas cosas en ese tiempo (buenas, malas y extrañas), pero en general creo que el balance es positivo. Dicen por ahí que este año se va a poner mejor, porque el pasado estuvo algo pesadito. Yo hasta no ver, no creer, pero por el momento estoy satisfecho con lo que he logrado en este importante aspecto de mi vida profesional. Sonamos...
Pero bueno, el pastel de zanahoria que les muestro, que por cierto estaba muy bueno, no fue para festejarme. Resulta que mi vecina laboral, Susy Q, cumplió años ayer, pero como anduvo con mil y un ocupaciones, lo festejó hasta hoy. Desde ayer prometió pastel y cumplió. Muchas felicidades, mi estimada. Pensaba regalarle unos stickers de Bob Esponja, pero a la señora sorda a la que usualmente se los compro, ya no tenía desde ayer. Será para la próxima.
—Susy Q degustando su pastel y recibiendo felicitaciones. Chica tipo muy popular—
En la tarde, después de la comida, estaba yo pensando en el famoso pastel de zanahoria. Justo en ese momento, me llegó un paquetito misterioso con un peludo invitado.
—Lente oscuro, grifo seguro...—
Resulta que Energizer intentó, dos veces si no mal recuerdo, organizar un rally fotográfico que se canceló en ambas ocasiones. Pues bien, el conejo era como para disculparse por todos los contratiempos que ocasionó el posponer indefinidamente dicho evento. Buen detalle, aunque unas pilas recargables de 9 voltios me hubieran hecho el día.
3 de junio de 2008
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2 comentarios:
Se ve bueno el pastel, lindo el conejo... saludos.
Quiero el conejo...
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